domingo, 30 de mayo de 2010

Malos tiempos para la lírica


Vivimos malos tiempos para la lírica dixit Golpes Bajos en 1983, y en estas estamos de nuevo, aunque el contexto, por lo menos, es diferente del que precipitó el 23-F como describía en mi anterior entrada. La democracia está más consolidada, estamos en la UE, el ejército y la guardia civil son ahora instituciones respectadas y respetables y ETA va camino de su desaparición de una vez. Y sin embargo "Z" no da una, ni cambiando el BOE parece ser capaz de arreglar esto, el gobierno autista, el paro fuera de control, la patronal en quiebra como las cajas del ladrillo, los casos de corrupción inundan juzgados y redacciones, los sindicatos decimonónicos y Mariano y sus acólitos ensimismados con llegar a Moncloa sin arrimar el hombro, y rezando para que las gürteladas no acaben pasándoles factura. Huele a fin de reinado. Como le paso a Brown. Caerá "Z" y Mariano será presidente, a la tercera y sin hablar gallego, pero será un Papandreu de derechas con un país por el que no rascó bola mientras estuvo en la oposición. Se topará con el FMI, la Comisión Europea, la banca alemana y la derecha catalana y vasca, que le marcarán los pasos. Ya cabe preguntar ¿Sabe Mariano hablar catalán en la intimitat?

miércoles, 26 de mayo de 2010

El Valle de los Creídos


El su excelente libro, Anatomía de un Instante, Javier Cercas trata de explicar con pluma precisa el intento fallido de golpe de Estado del 23-F, los entresijos de la trama golpista y la personalidad y trayectoria de los principales protagonistas de aquel día, empezando por el presidente Suárez, Gutiérrez Mellado, Tejero, Armada, Milans del Bosch o el Rey Don Juan Carlos. TVE grabó el instante y todos pudimos ver más tarde el patetismo de sus señorías, y el señorío de los tres valientes que no se tiraron al suelo: Suárez, Gutiérrez Mellado y Carrillo.


España padecía una crisis tremebunda, política, económica y social, el terrorismo de ETA y GRAPO mataba a decenas de personas mientras que la cúpula del ejército franquista seguía ahí, perturbado con los acontecimientos y expectante. El clima político de nuestra entonces joven democracia era infecto y la clase política conspiraba para acabar con Suárez, que terminó tirando la toalla un mes antes del golpe. En esas Armada pensaba iba de elefante blanco y "enderezar" España. Armada se ganó con sus intrigas ser inquilino del Valle de los Creídos. Otros en ese día también pero, como señala Cercas, quedan aún muchos flecos sin dilucidar. Y muchos otros creídos sueltos.

miércoles, 19 de mayo de 2010

El cantar de Mío Garzón‏

España siempre ha sido un país ingrato con sus gentes. Ahora parece que ya no nos vale el Juez Garzón tras décadas de servicios prestados hostigando narcos, corruptos, etarras, viles ministros, criminales y demás ralea. Ingratos. Una de las primeras obras literarias en castellano narra en prosa las aventuras y desventuras de Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador. Un héroe poco querido por su Rey. Gracias a estos nuevos infantes de Carrión, Manos Limpias, a la Falange y a unos jueces supremos cuya independencia arranca con la designación por los partidos políticos, Garzón ha acabado imputado y suspendido por cohecho y prevaricación. Se lo ha buscado dirán los que lo tienen entre ceja y ceja. En primer lugar por querer desenterrar los crimines del franquismo. Luego por querer cobrar de Botín sin domiciliar la nomina. Más tarde por querer escuchar las conversaciones de los imputados por el caso Gürtel con sus abogados. Ahora Garzón se va de destierro a La Haya a perseguir a canallas mundiales. Y seguro que volverá porque con éstas lo han convertido en un héroe global: quizás para ser Ministro como ya lo quiso ser antes con Felipe González, o para forrarse como Aznar dando conferencias, también mejor vestido tras descubrir todos los entresijos de los sastres del Gürtel. Le harán un poema y volverá como cual Cid moderno. Y Bono tendrá que prestarle uno de sus caballos preferidos para la foto.

jueves, 6 de mayo de 2010

Caciques del Siglo XX (Posdata)

Según El Confidencial tras la fusión, la nueva caja parece que va a pedirle al FROB (Fondo de Reordenación Ordenada Bancaria) una ayuda de 1.162 millones de euros. ¡Qué nombre! Reordenación ordenada. En otras palabras, el Mister Proper bancario. Así que después de tantas historias nuestras caixas necesitan liquidez porque no sólo han vaciado la hucha sino probablemente también pedido prestado de más. Además planifican reducir la plantilla entre 900 y 1000 trabajadores, más prejubilaciones, lo normal en una fusión, menos competencia, reducir sucursales que no todos pueden permitirse un zara en cada esquina. Vaya gestión. E logo, ¿Pretenden con estos gloriosos resultados, mantenerse en la ejecutiva, seguir con sus chanchullos? Aquí lo que hay es mucha cajadura.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Caciques del Siglo XX

Los caciques gallegos de antes tenían tierras, vivían en la capital, hacían política y sospechaban de los empresarios porque hacer dinero, trabajar para crear dinero, riqueza, era feo, mejor, más entretenido, gastarlo. Ellos se podían permitirlo, mantenidos con las rentas de papá, recaudando a los labradores que explotaban sus tierras, para lo cual iban de vez en cuando al pazo a ver si todo seguía en orden. Ellos arriba y el pueblo abajo. Era la ventaja de ser noble.


Las desamortizaciones, la industrialización y con ello el auge de la clase obrera, la lucha por los derechos democráticos, el sufragío universal, el éxodo rural y la universalidad de la educación terminaron con estos caciques, que ahora tienen que trabajar de nueve a siete, enviar a sus hijos ha hacer MBAs, pagar pensiones alimenticias y convertir sus pazos en casa rurales o alquilarlos para bodas.


Otra opción válida son las Cajas de Ahorro. Las huchas de alcaldes y autonomías. Vidas plácidas con los ahorros de los demás. Incrustados. Felices. Sin revuelos. Puestos a dedo, con asambleas generales coaptadas, sin la fiscalización de sus accionistas, sin tener que demostrar todos los días su valía en la bolsa, esa canalla, nombrando amigos en fundaciones y obras sociales, con sedes diseñadas por arquitectos de renombre. Sus pequeños Guggenheims. Y ahí están los Gayoso y Méndez de turno. Amigos de políticos que también esperan su oportunidad. Si no qué se lo digan a Rato, que cambió el FMI por Caja Madrid. Será buena estrella, o buenos amigos políticos, o las dos cosas a la vez. Y un buen sueldo garantizada la mayoría absoluta de Aguirre en un Madrid con tanto socialista despistado. Son caciques del siglo XX.


Pero estalló la burbuja de la construcción, las hipotecas basura, se hundieron los hermanos Lehnman, se llenó España de parados y déficit, y su mundo feliz empezó a resquebrajarse. Las vajillas y los sorteos de audis y mercedes ya no eran suficientes. Se secó la alberca, corren riesgo sus pernadas, hay que fusionarse, crecer para evitar CajasMadrid, para maquillar deudas o hacerlas más grandes, para el bien del país, para que los ahorros de los gallegos queden en Galicia, como si todavía no hubieran salido de la sucursal, en fin, para que al Estado no le quede más remedio que recapitalizar el chiringuito si esto se convierte en una griegada. Los caciques del XIX casaban bien a sus hijos para mantener las economías a flote, para no renunciar a nada, esperando que las cosas siguieran igual (de bien). Sin tener que rendir cuentas, sin los focos obligados que surgen en estos tiempos revueltos. Los de las cajas se fusionan.


La Voz nos cuenta que Caixanova no sabe hacer dinero, que sus gastos de funcionamiento absorben el 78% de su negocio corriente ¿Y Caixa Galicia la buena? Nos marean. Debe de haber un agujero en algún lugar. Peparados estámos. Y tras la fusión, habría que despedir a todas las ejecutivas y privatizar las cajas, la única manera de acotar la nefasta influencia que ejercen nuestros políticos. Ya vendrán luego los caciques del Siglo XXI. Entre tanto, en Galicia seguimos aguantando a caciques del XX.