Aznar confirma lo que intuíamos, él sí sabe cómo salir de esta maldita crisis que tanto se ensaña con España. Lo dábamos por supuesto, pero la duda es otra, ¿y Mariano? ¿puede Mariano también? Esta interrogante es más urgente. Huelen tiempos de salvadores. Florentino, ese ser superior tan añorado en el Real Madrid, parece que vuelve, queda por ver si Aznar también se anima, nos salva de "Z" y nos devuelve por la senda de la prosperidad despreocupada que tanto hizo soñar con el G-8. Despreocupada porque el modelo económico de sus gobiernso y de los de "Z", lograron crecimiento sostenidos gracias al ladrillo, salarios bajos, temporalidad y contratos basura, en fin, esa flexibilidad tan manida que ha permitido echar a la calle a millones de personas en un plis plas. Recomienda controlar el gasto público. Le recuerdan que su mujer es la teniente alcaldesa de Madrid, el Ayuntamiento más endeudado del país. Se justifica con las olimpiadas, que sabemos van a hacer mucho por cohesionar España. La entrevistadora ha desenmascarado el personaje. El menciona odio. Yo lo dejo en alivio. Sin duda, uno más de la galería de mis pesados nacionales.
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